Workflow Station y sus módulos ofrecen un sistema personalizable para transferir tanto vídeos como fotos o audio, todo ello desde varias fuentes y de forma simultánea
Pensando en las necesidades de los fotógrafos profesionales la empresa Kingston ha presentado el accesorio Kingston Workflow Station. Una base con la que poder conectar prácticamente cualquier tarjeta de memoria y así poder leer y grabar datos en las mismas a la máxima velocidad. Esta estación multitarjeta USB-C con diseño modular está enfocada a proporcionar almacenamiento, y soporta hasta cuatro accesorios de expansión, entre los que se incluyen lectores de tarjetas SD y microSD, así como puertos USB estándar en el miniHub.
Tanto si se realizan tomas en resoluciones 4K/8K con múltiples cámaras con grabadores portátiles de sonido para cada host, o si se están realizando filmaciones de respaldo con drones y equipos GoPro, es posible conectar hasta cuatro lectores de forma simultánea al panel de acoplamiento para transferir el material rápidamente. Además, su conexión de alta velocidad permite trabajar directamente sobre los soportes, agilizando los procesos de posproducción.
Máxima velocidad
La conexión de este interesante accesorio es muy sencilla. La estación se conecta al ordenador a través de una toma USB 3.1 Gen 2, con lo cual se puede llegar a obtener una velocidad máxima de 10 Gbps. Esta velocidad es más que sobrada para las tarjetas de memoria que se comercializan hoy en día y que funcionan con Workflow Station. Además, esto garantiza una alta velocidad de transferencia entre los medios cuando se utilizan varios módulos de forma simultánea.
Es muy importante tener en cuenta que para sacarle el máximo partido a la estación y disponer de las mayores tasas de velocidad de la transferencia, también es preciso contar con tarjetas de memoria que dispongan de una gran velocidad, tanto de lectura como de escritura. Las tarjetas UHS II son mucho más rápidas que las UHS I, hasta tres veces más. Esto no sólo se aprecia en el lector, también a la hora de disparar con la cámara en ráfaga y, especialmente, a la hora de grabar vídeo.
La base es compatible tanto con ordenadores PC como con Mac (Windows 8, 8.1, 10 y Mac OS v10.10.x o superior).
La base
La base del sistema Workflow Station está fabricada en plástico con un acabado que simula el aluminio pulido, tiene unas dimensiones de 160 x 70 x 56 mm y un peso de 292 gramos. En su base dispone de dos almohadillas antideslizantes a cada lado. Se conecta al ordenador (PC o Mac) a través de un cable tipo USB-C y también a la corriente eléctrica a través de una fuente de alimentación externa de 12 voltios y 60 vatios. Este transformador es más que suficiente para asegurar la alimentación del sistema y que éste pueda trabajar todos los módulos a la vez y sin problemas.
A diferencia de otras estaciones de precio superior, que ofrecen conectividad USB, vídeo o Ethernet, la Workflow Station de Kingston se limita a ofrecer cuatro ranuras equipadas con USB-C (3.1 Gen 1) y una velocidad de 5 Gbps para cada uno de los diferentes módulos. Un lector de tarjetas de memoria convencional que admita el estándar UHS-II funciona normalmente a una velocidad de hasta 2496 Mbps. Como los módulos de la Workflow Station admiten hasta dos tarjetas funcionando de forma simultánea, la velocidad de 5 Gbps garantiza que se pueda trabajar siempre a una velocidad adecuada.
En la práctica, Workflow Station es una unidad extremadamente rápida, aunque como es lógico, esta velocidad está limitada por la capacidad de transferencia de las propias tarjetas de memoria utilizadas. En las pruebas que realizamos siempre conseguimos valores cercanos al máximo de velocidad que podía ofrecer cada soporte de memoria que utilizamos.
Los módulos
Cada uno de los módulos está fabricado en plástico con un acabado que simula el aluminio pulido y cuentan con una toma USB-C. Se puede insertar directamente en la estación o utilizarlos de forma independiente gracias a un cable que se incluye junto con el producto. Son robustos y resistentes a las caídas y a los golpes, y al disponer de unas guías en la base se emplazan sin problemas en la Workflow Station. Esto parece que no es muy importante, pero hemos probado muchos otras bases, para discos duros, por ejemplo, en los que a veces costaba insertar correctamente la unidad.
Los módulos son muy ligeros y tienen un tamaño reducido, pudiéndose guardar en cualquier bolsillo de forma holgada (62,87 x 16,87 x 50 mm), por lo que son muy cómodos de transportar. El módulo para tarjetas SD tiene un peso de 31 gramos y el lector de microSD 29. Además, al incluir su propio cable de 50 centímetros y poder funcionar de forma independiente, son ideales para trabajo de campo. De esta forma la base Workflow Station queda como un soporte de trabajo de escritorio.
Los módulos se conectan a la base a través de USB 3.1 Gen 1, lo que proporciona una velocidad de 5 Gbps. Aunque es la mitad de la velocidad a la que se conecta la base con el ordenador esto no es un problema, ya que sigue siendo más que suficiente para los soportes de memoria existentes. Esto garantiza que el Workflow Station pueda trabajar de forma simultánea con dos módulos disponiendo cada uno uno de ellos, en este caso, de un total de 5 Gbps.
Capacidad de los módulos
Tanto en el módulo MicroSD como el SD se puede operar de forma simultánea con dos tarjetas de memoria. Es importante tener esto en cuenta ya que hay lectores que, pese a que disponen de varios ranuras para tarjetas: sólo permiten utilizar una de ellas a la vez. Este no es el caso de los módulos del sistema Kingston Workflow Station. Por otro lado, el módulo USB 3.0 permite la conexión simultánea de una llave USB-A y otra de tipo USB-C.
Rendimiento
Hay que tener en cuenta que todas las conexiones se realizan por medio de tomas USB-C. El equipo está pensado para sacarle el máximo partido a este tipo de conexión. Pero aquellos que lo necesiten pueden usar un adaptador USB-C a USB-A o un cable USB-C a USB-A que se deberá adquirir por separado. El precio de un cable o un adaptador de este tipo puede rondar los 5 € y en muchas ocasiones puede resultar bastante útil para poderlo conectar a cualquier equipo (todavía hay bastantes ordenadores antiguos que no disponen de USB-C). No hemos apreciado mermas en el rendimiento del equipo usando un adaptador.
Respecto a los resultados obtenidos en la lectura/escritura de los diferentes soportes que admite la Workflow Station (MicroSD, SD y USB-C/USB-A): no nos detendremos mucho en ello. Sobran resultados, comparativas o gráficas cuándo la velocidad está siempre a la altura de las especificaciones de la tarjeta utilizada. En todas las pruebas que hicimos se logró un rendimiento acorde con las velocidades especificadas en cada una de las tarjetas que probamos.
Sí que cabe reseñar que cuando se hacen lecturas o escrituras simultáneas desde la Workflow Station, con varios soportes de memoria en un mismo módulo, hay una merma en el rendimiento. También la hay cuando se lee de diferentes módulos en la estación a la vez. Lo que ha de valorar el usuario es si esa penalización en la velocidad se ve compensada por el gran ahorro de tiempo en el flujo de trabajo. Ya que de otra forma nos veríamos obligados a realizar las tareas de forma independiente, conectando los lectores y tarjetas de uno en uno; y teniendo que estar pendientes de todos estos procesos. Con lo que también perderíamos un precioso tiempo.
Conclusión
Para todos aquellos usuarios que utilizan diferentes soportes y que, por tanto, se ven obligados a trabajar de forma regular con una gran cantidad de tipos de tarjetas de memoria, la estación Kingston Workflow Station es ideal ya que aúna en un único accesorio la posibilidad de leer los soportes más habituales. Y todo ello con la máxima velocidad de lectura y grabación al trabajar sobre un soporte USB-C de última generación.
Los diferentes módulos se pueden utilizar tanto de forma independientes como a través de la estación, con lo cual ofrecen una portabilidad bastante interesante. El sistema no es precisamente económico, pero además de práctico ofrece una solución completa y eficaz para las transferencias de datos en una única base .
Como elementos positivos podríamos mencionar la flexibilidad y sencillez del soporte, la velocidad de la transferencias de datos y también la idea de que los módulos se puedan utilizar de forma independiente. Esto es ideal para facilitar la movilidad de los mismos, pudiendo ser utilizados en cualquier momento y en cualquier ordenador portátil o teléfono móvil, por ejemplo.
Respecto a los aspectos negativos tan sólo podemos citar el precio o que en los módulos no se indica, por medio de algún dibujo o marca, la orientación en la que se deben insertar las tarjetas microSD o SD, algo que, por otro lado, tampoco representa un problema.
Características técnicas
Panel de acoplamiento
| Interfaz | USB 3.2 Gen 2 |
| Conector | USB-C |
| Entradas USB compatibles | Miniconcentrador USB incluido: USB-A, USB-C |
| El paquete incluye | Panel de acoplamiento de Workflow Miniconcentrador USB-A, USB-C Cable USB-C a USB-C Adaptador eléctrico de 60w (con 4 adaptadores) Guía de inicio rápido |
| Dimensiones | Panel de acoplamiento de Workflow: 160,27 x 70,27 x 55,77 mm Miniconcentrador USB: 62,87 x 16,87 x 50 mm |
| Peso | Panel de acoplamiento de Workflow: 292 gramos Miniconcentrador USB: 29 gramos |
| Temperatura de servicio | -0°C~60°C |
| Temperatura de almacenamiento | -25°C~85°C |
| Compatible con | Windows 10, 8.1, 8 y Mac OS (v. 10.10.x +) |
Módulo miniconcentrador
| Interfaz | USB 3.2 Gen 1 |
| Conector | USB-C |
| Tarjetas compatibles | Módulo microSD Reader Compatible con tarjetas microSD UHS-II Retrocompatible con tarjetas microSD UHS-I Módulo SD Reader Compatible con tarjetas SD UHS-II Retrocompatible con tarjetas SD UHS-I |
| Dimensiones | 62,87 x 16,87 x 50 mm |
| Peso | Módulo microSD Reader: 29 gramos Módulo SD Reader: 31 gramos |
| Temperatura de servicio | 0 °C ~ 60 °C |
| Temperatura de almacenamiento | -25 °C ~ 85 °C |
| Compatibilidad | Windows 10, 8.1, 8 y Mac OS (v. 10.10.x +) |
El sistema Kingston Workflow Station cuesta 99,99 € y los módulos tienen un precio de 29 € para el modelo de tarjetas SD y 35,69 € para el modelo de tarjetas microSD. Más información en la página web del fabricante.
